Gestión
7 consejos para que el comercio electrónico invierta durante y después de COVID-19
Reflexión sobre los impactos de la pandemia para el comercio minorista digital y sugerencias sobre cómo es posible superar obstáculos con la ayuda de la tecnología.
El comercio electrónico ha mostrado excelentes resultados durante la pandemia de COVID-19.
Mientras que los sectores con poca expresión en el comercio minorista digital, como la salud, por ejemplo, han ganado espacio, otros, como el turismo, enfrentan desafíos para sobrevivir. “¿Cómo superar este escenario?” y “¿Cómo mejorar la performance en ese momento?” han sido preguntas muy comunes para quienes se ocupan del comercio digital, a las cuales la tecnología ha demostrado ser un gran aliado para responderlas.
La compañía Minsait establece un paralelismo entre el comercio electrónico brasileño y español, señalando que ambos crecieron a niveles de al menos dos dígitos por año, un ritmo que debería mantenerse en un escenario sin coronavirus. “Es posible ver que la mayor variedad de productos disponibles en línea, la agilidad para comprender al consumidor digital y los avances en logística han permitido desarrollos significativos. Actualmente, es necesario que las empresas estén atentas para aprovechar el momento en que todos usan el comercio electrónico para fortalecerse”, destaca Marcelo Bernardino, jefe de Industria y Consumo de Minsait en Brasil.
Según la compañía, el fortalecimiento de la presencia digital en este período y posterior a COVID-19 dependerá de siete estrategias esenciales respaldadas por la inversión en tecnología. “Acelerar la digitalización en la relación con los clientes es un paso esencial”, defiende Bernardino.
Mira a continuación algunas estrategias esenciales para este período
- Invertir en plataformas de comercio electrónico ágiles y versátiles para llevar a cabo promociones personalizadas.
- Crear canales de distribución controlada y escalable de productos según la demanda: un punto especialmente importante para los supermercados, que enfrentan picos de consumo muy altos y pueden planificar mejor la cadena de distribución con inteligencia y análisis capaces de facilitar este trabajo.
- Implementar modelos logísticos de distribución logística local, recolección y entrega de productos: algo que ya es ampliamente utilizado por los grandes minoristas. Utiliza las tiendas físicas como pequeños centros de distribución, facilitando la logística.
- Fortalecer y ampliar los modelos de servicio y entrega: el uso de aplicaciones de ‘entrega’, por ejemplo, ha sido una alternativa efectiva para los restaurantes. En el futuro, la idea es que las tiendas mismas puedan establecer asociaciones más efectivas o implementar sus propios sistemas de entrega.
- Redefinir la logística entre tiendas, implementando modelos de distribución mixta: a medio plazo, fusionar aún más las oportunidades de “entrega a domicilio” y “recogida”, que son cada vez más objetivo de los consumidores, especialmente debido a problemas de flete.
Consolidación de los modelos “flagship”: ya eran modelos con una amplia posibilidad de crecimiento y, después de la pandemia, deberían ganar aún más fuerza. Los consumidores valorarán aún más la agilidad para comprar en este tipo de tienda- Análisis avanzado para evitar posibles crisis o aprovechar nuevas oportunidades de negocio: invertir en análisis de datos será esencial para que las empresas tengan éxito. Cuanto mayor sea la inversión en datos para comprender al cliente, mayores serán las posibilidades de éxito.
“Las empresas tendrán que invertir cada vez más en datos y tecnología para consolidarse. Hoy en día, es posible ver la diferencia que trae la presencia en Internet y cómo es posible aprovecharla de la mejor manera posible. Sin duda, estamos atentos a esa tendencia”, concluye Bernardino.