Gestión
Mostrar el dulce
La exposición puede resultar una herramienta eficaz a la hora de vender productos. En Manny’s y Gold Top se pueden repasar algunas claves del arte de mostrar.
Una serie de sucesivos impactos que van in crescendo, así se presenta Mannys a la hora de recibir a sus clientes. El negocio funciona allí desde principios de los 80’, una ex fábrica de 3600 metros cuadrados, de los cuales la mitad conforma el showroom. Las dimensiones faraónicas del salón, le permiten a sus creativos elaborar una estrategia peculiar a la hora de exhibir sus productos. “La idea es que el cliente no se encuentre con todo apenas entra sino que vaya descubriendo, disfrutando y sorprendiéndose” asegura Sebastián Perego, encargado del marketing y la publicidad.
Guiar la mirada. A la hora de exhibirse Gold Top apuesta a una vidriera variada, y en esta dirección, apunta a poder ofrecer a sus visitantes “La mayor cantidad de opciones posibles” comenta Sergio Pagés, encargado del local.
Mostrar no es sólo fascinar sino que resulta un modo eficaz de comunicación. En este sentido, la manera en que los comerciantes exponen la mercadería es determinante a la hora de situar al potencial comprador y orientar sus búsquedas. En Gold Top consideran que es importante establecer un orden y no mezclar: Separa sonido y música, sectorizar también por marcas e instrumentos para que el cliente encuentre rápidamente el ejemplar que vino a buscar y lo pruebe, ya que en definitiva: “Es lo que va a definir la compra”, asegura Sergio.
Comunicar. Para Sergio Lamas, gerente de ventas de Manny’s, la cuestión no está solamente en exhibir sino en informar: “Agregar una identificación técnica, en productos de audio profesional o en accesorios que incluya descripción y precio, marca una diferencia”. Optimizar las zonas disponibles es otra de las cuestiones a tener en cuenta. En este sentido, hace un año y medio, Manny’s realizó una serie de reformas en la distribución espacial que le permitieron aprovechar mejor el lugar y proponer nuevos recorridos. Se dieron cuenta de que podían utilizar el área de las columnas, espacios “muertos” y las adornaron con platillos, bajos y guitarras. De esta manera liberaron los pasillos, invitando así al visitante a llegar hasta el fondo del salón y después volver por el otro sector.
Innovar. Al momento de armar la vidriera la consigna es no aburrir, “esto está vivo, diariamente hay que ir cambiando” asegura Sergio Pagés. Arriesgar modificaciones funciona a veces un poco intuitivamente aunque no por ello deja de ser eficaz: “Te llevas sorpresas, nos ha ocurrido con una melódica muy sencilla. Se puso en vidriera y se empezó a vender en cantidad”.
Sergio destaca también el valor del merchandising y la publicidad estática aunque reconoce que por cuestiones económicas se produce muy poco. Crear una atmósfera, comunicar, establecer recorridos. Exponer es parte del arte de vender, una tarea que invita a ser encarada con audacia y creatividad. El showroom de Manny’s sorprende a sus visitantes por sus inusitadas dimensiones e instrumentos de calidad
Gold Top. “Hay imágenes que quedan muy impregnadas en el músico”, asevera Sergio