Gestión
Comerciantes: Cómo conseguir un “¡Volveré a tu tienda!”
La humanización y personalización son puntos esenciales para una mejor experiencia de compra y fidelización dentro del punto de venta.
La tecnología avanza a un ritmo vertiginoso, siguiendo la famosa Ley de Moore, que predice que la capacidad de las computadoras se duplica cada dos años. Thomas Friedman, columnista de The New York Times, señala que la velocidad de este avance tecnológico ya supera la capacidad humana de adaptación. Si bien las habilidades humanas han crecido gradualmente a lo largo de la historia, la tecnología ha experimentado un salto exponencial desde el siglo XX.
Es un error pensar que el comercio minorista no se vería amenazado o incluso afectado por los grandes y poderosos poderes del “.com”, con sus instalaciones y servicios que te permiten realizar las compras deseadas el mismo día, o incluso en cuestión de minutos, además de beneficios, como cashback, puntos, viajes, eventos y otros.
Pero este avance desenfrenado y asfixiante de la tecnología ha causado grandes daños al ser humano. Nunca se ha hablado tanto en el mundo de conductas nocivas versus exposición a pantallas y salud mental. Prueba de ello es el estreno de la película “Divertidamente 2”, un éxito de taquilla principalmente porque presenta una nueva emoción: la ansiedad, un trastorno que ha crecido cada año debido a esta tecnología. La propia OMS (Organización Mundial de la Salud) destaca a Brasil, uno de los países con uno de los mayores números de exposición a pantallas y redes sociales, como la población con mayor prevalencia de trastornos de ansiedad del planeta.
Así, la tecnología ha abierto cada vez más espacios para el retorno a la humanización, a la experiencia sensorial, al contacto con otro ser humano.
Oportunidad para el comercio físico y su servicio humanizado
PwC realizó una encuesta con 15 mil participantes de 12 países, incluido Brasil, que revela la importancia de una experiencia de cliente más humana y diferenciada:
- El 73% de los consumidores considera la experiencia un diferenciador importante en las decisiones de compra.
- En Brasil, esta tasa alcanza el 89%, la más alta entre los países participantes.
- El 42% de los encuestados pagaría más por una experiencia acogedora y amigable.
- El 32% dejaría de comprar una marca que le encanta después de una mala experiencia. En América Latina, esta tasa alcanza el 49%.
En el mercado actual, las tiendas físicas son más que simples puntos de venta. Son verdaderos centros de experiencia que deben integrarse con el mundo online, ya que no hay forma de escapar de la tecnología, ofreciendo una experiencia de compra fluida y personalizada. Este concepto se conoce como Phygitalización, la perfecta integración entre experiencias online y offline.
¿Cómo funciona la Phygitalización?
Combinando la comodidad y personalización de lo digital con el tacto y una experiencia humanizada. Por ejemplo, entrar a una tienda física y tener acceso al catálogo completo de productos a través de dispositivos digitales. O realizar una compra online y recoger el producto en la tienda camino a casa, el mismo día. Ésta es la esencia de la Phygitalización.
Experiencias inmersivas: Las tiendas físicas se transforman en espacios que estimulan los sentidos, utilizando tecnologías y storytelling para crear experiencias únicas y memorables. El mejor ejemplo es la tienda brasileña Fast Shop, en San Pablo. Son 18 ambientes, divididos para retratar la jornada diaria de una persona en casa. Esta nueva forma de localizar los artículos hace que los consumidores se pregunten si vale la pena tener un determinado objeto en una determinada sala de la casa.
Además, todos los productos cuentan con un Código QR para que el cliente pueda ver más información e incluso realizar una compra allí mismo, sin tener que pasar por caja. La atención en la tienda online, para quienes no tienen intención de acudir a la tienda física, también se produce de forma diferente: toda la venta, desde el análisis de los productos hasta la compra final, está a cargo de un representante comercial de una de las unidades de la cadena, mediante una aplicación, que puede responder preguntas sobre productos, métodos de pago y entrega.
Personalización en tiempo real: Los datos en línea y fuera de línea se combinan para ofrecer productos y servicios personalizados a cada cliente, en tiempo real. Por ejemplo: la tienda Nike de la Quinta Avenida en Nueva York tiene un piso dedicado exclusivamente a la personalización. Hay zapatos y ropa en colores simples que se exhiben para que los recojas y los lleves al área de personalización para salir con un producto único creado por ti.
Comodidad y eficiencia: La Phygitalización permite a los clientes comprar online y recoger en la tienda, o probar en la tienda y comprar online, todo con agilidad y practicidad. Otro ejemplo son las tiendas físicas de la marca Amaro, llamadas Guide Shops, que no cuentan con stock. Todo el espacio está lleno de la última colección. El cliente puede acudir al local, probar los productos deseados y realizar la compra mediante Código QR, programando la recepción de las piezas.
Compromiso y lealtad: La integración de lo online y lo offline crea una experiencia de compra más rica y atractiva, lo que genera la lealtad del cliente y forma una comunidad alrededor de la marca. En las tiendas Nespresso, por ejemplo, el asistente comercial te anima a probar nuevos aromas de café en una zona que parece una bonita sala de estar mucho antes de ofrecerte cualquier artículo para comprar.
Por supuesto, los ejemplos anteriores son de grandes empresas con grandes ingresos y presupuestos, pero la reflexión que debemos hacer es: Cuando consigo que mi cliente venga a mi tienda física, ¿le estoy ofreciendo una mejor experiencia de compra que la que tendría en casa o incluso desde su celular? ¿O simplemente entra y recibe un “¿Puedo ayudarte?” de nuestro vendedor, compra y sale?
¿No puedo ofrecerle algo nuevo, diferente y personalizado utilizando los datos que puedo recopilar de Internet para que él regrese?
Ofrecer una experiencia interesante al consumidor puede ser el punto crucial del proceso de compra. Integrar la vasta dimensión de información y datos, la conveniencia y la personalización de lo digital con la experiencia en persona puede ser (y ciertamente es) la clave.