El poder del reconocimento

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El poder del reconocimento
Lo que más dignifica a una persona es el hecho de ser reconocido por el otro.  Las empresas deben formular estrategias de motivación dentro de la organización.

Aunque exista la creencia común que la motivación es una de las bases principales  para el buen funcionamiento de una empresa, normalmente nos  olvidamos de analizar cuidadosamente cuales serían los precedentes de esa motivación. Frecuentemente, los empresarios, jefes y líderes se empeñan en obtener respuestas a algunas cuestiones, tales como: ¿Por qué no consigo motivar a mis empleados? ¿Por qué no logro motivar a mi equipo?
En realidad, la mayoría de esos líderes sólo considera la motivación  por el lado material, el del dinero y el del confort. Mientras que, hablar de motivación involucra aspectos mucho más profundos del ser humano: su valor, y su dignidad.  Y para que eso se satisfaga, es necesario que haya reconocimiento por parte de sus superiores, de sus compañeros de trabajo, y de sus subordinados.

Como dice el importante filósofo Hegel (Georg Wilhelm Friedich Hegel, 1770-1831): “El hombre lucha todo el tiempo  por su reconocimiento”. Lo que más dignifica a una persona es el hecho de ser reconocido por el otro. En ese sentido, las empresas no necesitan generar mecanismos artificiales de motivación sino que deben formular estrategias de reconocimiento dentro de la organización. La motivación es la consecuencia directa de un  sistema eficaz de reconocimiento.
El prestigio no es solamente material, no solo significa un aumento de salario, o el establecimiento de un plan de carrera. Primero, la gente necesita saber cuál es el propósito que tiene dentro de la empresa. ¿Para qué está allí? ¿Qué es lo que hace exactamente? ¿Cuál es el contexto de sus funciones? Sin ello, se desorienta, y se desmotiva. De este modo, una de las tareas principales  de un gerente es mostrar a sus empleados la razón y la importancia de lo que ellos mismos realizan dentro de sus organizaciones. 

Todos nosotros, sin excepción, necesitamos que nos reconozcan. El ordenanza de la empresa debe saber que una buena limpieza mejora el ambiente, demuestra el esmero de la empresa y, en consecuencia, preserva a los clientes. El día en que el ordenanza se dé cuenta de la importancia de su trabajo, de cuan relevante él resulta en el engranaje de la organización, y además, el día que obtenga el debido reconocimiento por parte de la empresa, estará motivado y dispuesto hasta el punto de sacrificarse por ella. 

    Existen numerosos ejemplos de gente muy exitosa en el aspecto financiero, tales como atletas de renombre internacional, que viven momentos de intensa desmotivación profesional. ¿Cómo es posible que una persona de esas no esté motivada, ya que posee cualquier bien material que desea? Seguramente está atravesando una crisis por falta de reconocimiento.  
     En ese sentido, hablar de motivación remite obligatoriamente  a los valores, a la dignidad y al reconocimiento humano. Así, las reflexiones e indagaciones sobre este tema deberían ser: ¿Estoy valorando a mi empleado o colega? ¿Soy reconocido por todos aquellos con los que me relaciono en la empresa? Las respuestas a esas preguntas son fundamentales para una estrategia de éxito en el campo de la motivación de las organizaciones.

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Por último, se percibe que el reconocimiento está mucho más ligado a la esencia de la persona, o a su propia alma, que a  incentivos financieros, poder o status. Y, es por ello que la verdadera motivación depende de ese estado de ánimo o del alma. Sin ello, se vuelve una motivación  superficial, sin consistencia y que se va rápidamente.

Referencias bibliográficas
Cortella, M. S. Qual é a tua obra? Rio de Janeiro: Vozes, 2007.
Fukuyama, F. The end of history and the last man. Nova York: Free Press, 2006.

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